¿Precuela o reboot?
En su estupendo texto, escrito a raíz del estreno de Cruella, el crítico Alberto Corona reflexiona en torno a las actitudes revisionistas de Walt Disney Productions con sus clásicos. A nadie se le escapa que estas decisiones tienen mucho de maniobra comercial, con la intención de adaptar antiguas narraciones al contexto sociopolítico moderno, pero, al mismo tiempo, pueden aprovecharse para ofrecer reflexiones de valor y experimentos gozosos. Esto es lo que sucede en el nuevo estreno del estudio, Cruella, una cinta que funciona al mismo tiempo como precuela de 101 dálmatas y como cuestionamiento de la mítica figura de aquella obra, la villana Cruella De Vil —a diferencia de la versión de acción real de 1996 en la que Glenn Close interpretaba a la mítica figura siguiendo la línea marcada por la original de animación—. Porque quizás lo que habría que preguntarse es, ¿estamos ante una precuela o ante un reboot? En otras palabras, ¿la película continúa el canon del universo 101 dálmatas o crea uno nuevo?
Como ya ocurría en Maléfica (2014), donde se revisaba el retrato de la antagonista de La bella durmiente, esta historia de orígenes permite entender mejor a la villana de la historia, hasta el punto de que se convierte en víctima. Lo más valioso de los creadores de Cruella consiste en su capacidad para mantener a su personaje en el lado oscuro, pero cambiando una maldad rotunda aunque simple por una tendencia al mal, que va de una psicopatía heredada a las consecuencias de haber vivido un pasado lleno de sufrimiento. En este sentido, Cruella se muestra un ser mucho más humano, a ratos entrañable y a ratos despreciable, pero siempre complejo y rotundamente carismático, algo en lo que tiene buena parte de responsabilidad la extraordinaria interpretación de Emma Stone. También ayuda el trabajado apartado visual, cuyos movimientos de cámara, encuadres, iluminación y fotografía convierten el filme en una narración llena de fuerza y ligereza. El director, Craig Gillespie, y su actriz protagonista, consiguen que nada menos que ciento treinta minutos de metraje se pasen en un suspiro.
CRUELLA Dirección: Craig Gillespie Reparto: Emma Stone, Emma Thompson, Joel Fry, Paul Walter Hauser, John McCrea, Emily Beecham, Mark Strong, Kayvan Novak, Kirby Howell-Baptiste, Jamie Demetriou, Niamh Lynch, Andrew Leung, Ed Birch. Género: thriller, comedia. Estados Unidos, 2021. Duración: 134 minutos.
Yago Paris
Crítico cinematográfico en pleno máster en Teoría del Cine. Escribo en los medios digitales Revista Insertos y Cine Divergente. También reflexiono sobre cine en el podcast Críticas Sobre La Marcha.
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