Wolfwalkers
Maravillosa, otra vez Yago Paris En las últimas décadas el estándar de animación comercial en Occidente ha evolucionado del dibujo tradicional con materiales físicos al diseño en 3D. Si hacemos […]
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Maravillosa, otra vez Yago Paris En las últimas décadas el estándar de animación comercial en Occidente ha evolucionado del dibujo tradicional con materiales físicos al diseño en 3D. Si hacemos […]
En las últimas décadas el estándar de animación comercial en Occidente ha evolucionado del dibujo tradicional con materiales físicos al diseño en 3D. Si hacemos un resumen simplista, se podría decir que Pixar tomó el testigo de Disney. Siguiendo su estela aparecen otros estudios, como DreamWorks o Illumination Entertainment, que elaboran la animación por ordenador con un concepto similar de primar la representación realista para el gran público, aunque con especial atención al infantil, y con la comedia como eje central. Al mismo tiempo perviven otros modelos en los que el componente formal está más presente. Tal es el caso del estudio Laika, que basa sus proyectos en la técnica stop motion, o el de compañía irlandesa Cartoon Saloon. Esta última crea filmes de animación por ordenador, pero su aproximación estética nada tiene que ver con la de Pixar. Tomando el 2D como una de las señas de identidad, y heredando estéticas más habituales de la animación tradicional, las películas de este estudio destacan por un preciosismo visual envidiable, donde los escenarios son tan relevantes como los personajes, hasta el extremo de que desde el punto de vista de la animación las imágenes más potentes de los filmes son precisamente las que corresponden a los planos generales.
Todas estas características están presentes en Wolfwalkers, que se estrenó de manera limitada en cines de algunos países —ninguno de ellos España— y posteriormente la ha distribuido Apple TV+. Tomm Moore dirige su tercer filme para Cartoon Saloon, con el que completa la trilogía sobre el folclore irlandés, tras El secreto del libro de Kells (2009) y La canción del mar (2014), y en esta ocasión le acompaña a los mandos Ross Stewart. La cinta narra la historia de Robyn, una niña que descubre en un bosque cercano a su pueblo una manada de lobos liderada por una wolfwalker, un ser que la sociedad considera una invención pagana. El terrateniente de la zona ha decidido acabar con los lobos, que impiden el correcto desarrollo de las actividades ganaderas, por lo que Robyn sumará fuerzas con su nueva amiga para asegurar la supervivencia de los animales. A partir de esta premisa, Moore elabora otro extraordinario cuento de animación arrolladora, que vuelve a basar su máximo atractivo en el desarrollo de los escenarios. Destaca la manera en que se construye la perspectiva, habitualmente asociada a la pintura prerrenacentista, donde se representaba la profundidad de campo a lo largo del eje vertical, lo que enfatiza la esencia 2D del proyecto. Otra de las características más significativas de la propuesta se manifiesta en las escenas de mayor intensidad emocional, donde el fondo de la imagen, habitualmente figurativo, se transforma en una representación expresionista de corte abstracto, acompañando los sentimientos del personaje que protagoniza el instante.
Por tanto, la puesta en escena de Wolfwalkers es, como en filmes previos del director, lo más destacable del conjunto, como también sucede en otras obras de Cartoon Saloon. Sin embargo, empieza a manifestarse una cierta sensación de repetición en las propuestas del estudio, algo que se evidencia con especial fuerza cuando se analiza la obra de Tomm Moore. Esto se observa cuando se piensa en la relevancia de esta cinta: a pesar de su maravillosa estética, su excelente trazo, la notable plasmación de las emociones de sus personajes y su gran comicidad, que son una serie de logros que Cartoon Saloon ya había alcanzado en películas previas, a quien esto escribe le resulta inevitable tener la sensación de que Wolfwalkers apenas trascenderá y que dentro de unos meses pocas personas se acordarán de ella.
WOLFWALKERS
Dirección: Tomm Moore, Ross Stewart.
Reparto: Honor Kneafsey, Eva Whittaker, Sean Bean, Simon McBurney, Tommy Tiernan, Maria Doyle Kennedy, Jon Kenny, John Morton, Nora Twomey.
Género: fantasía medieval. Irlanda, 2020.
Duración: 103 minutos.