Algunas bestias
El infierno son los otros Jesús Cuéllar Al inicio de Algunas bestias, un bote llega a una preciosa isla y entra tímidamente en el estático y todopoderoso plano cenital, que […]
Estrenos, críticas, comentarios de cine y algunas notas sobre las visiones
El infierno son los otros Jesús Cuéllar Al inicio de Algunas bestias, un bote llega a una preciosa isla y entra tímidamente en el estático y todopoderoso plano cenital, que […]
Al inicio de Algunas bestias, un bote llega a una preciosa isla y entra tímidamente en el estático y todopoderoso plano cenital, que después nos muestra a las hormigas humanas que lo abandonan, lejanas y perdidas en la inmensidad. Son los miembros de una familia con ciertos posibles, compuesta por los abuelos (interpretados por Paulina García y Alfredo Castro), la hija de ambos, su marido, y sus dos hijos adolescentes.
Por supuesto, las apariencias engañan. Esa familia potencialmente corriente, que debía pasar unos días de descanso en un paisaje paradisiaco de la costa chilena, y también discutir ciertos planes de futuro, viene envuelta, como muchas otras, en sus propios e irresolubles rencores y recelos, y acaba buscándose, y mereciéndose, una encerrona a la altura de todos esos conflictos.
En este su segundo largometraje, presentado en el Festival de San Sebastián 2019, Jorge Riquelme Serrano retrata sin pudor y con saña algunos de los más deleznables comportamientos humanos. Con Eduardo Bunster Charme como director de fotografía y haciéndose cargo él mismo del montaje junto con Valeria Hernández, Riquelme se lanza a este descarnado retrato de familia con una apuesta visual abrumadora, compuesta de tomas cenitales como la que inicia el filme; de elocuentes y envolventes planos que, desplazándose en semicírculos, definen la individualidad de los personajes, incluso cuando están en grupo; y, sobre todo, de definitorias tomas a cámara fija que, como si fueran la mirada de un espectador teatral o del presidente de un tribunal, se colocan delante de los personajes para escrutarlos y evidenciar que los poderosos abusan de su poder siempre que pueden, que los débiles se quedan paralizados ante el abuso, porque son los que más tienen que perder, y que la pureza del océano no puede lavar por completo todas las heridas.
Se podría decir que el relato de Riquelme (que plasma un guión escrito junto con Nicolás Diodovich) es demasiado retorcido; que, para explicar los deseos y frustraciones que corroen a sus personajes, así como las diferencias de clase y edad que envenenan sus relaciones, se recrea con morboso detenimiento en lo más desagradable. Sin embargo, este cuento perturbador, como de Haneke austral, tiene una claustrofóbica lógica interna, y sus indudables desequilibrios argumentales se salvan en cierta medida gracias a una personalísima concepción del relato formal, y a una puesta en escena y unas interpretaciones absolutamente memorables.
Con una economía de gestos asombrosa, los veteranos Paulina García y Alfredo Castro, turbio núcleo de poder de esta familia, transitan aparentemente sin esfuerzo de la sonrisa al asco, del desvalimiento a la tiranía. Y los demás actores, especialmente la pareja de adolescentes (Consuelo Carreño y Andrew Bargsted), que constituye el otro eje de la historia, no les van a la zaga. Prueba de ello son las escenas, meticulosamente «improvisadas» con los intérpretes, en las que la cámara capta a la familia al completo, especialmente en esa última cena en la que el supuesto cariño que debe regir las relaciones familiares está cogido con unos alfileres que no tardan en clavarse los unos a los otros sin piedad. «Quieren que vivamos lo que ellos mataron. Quieren que aprenda lo que ellos no saben» dice una joven voz femenina en la canción Despierta, compuesta por Carlos Cabezas, que suena en los créditos finales del filme, después de que hayamos visto a esa familia a la deriva, entre el desamparo y la perplejidad. Entre la ruptura y la dolorosa aceptación de la continuidad.
Puedes ver ALGUNAS BESTIAS en FILMIN
La película forma parte de la programación del D’A FILM FESTIVAL, que también puedes encontrar en la plataforma Filmin